Feeds:
Entradas
Comentarios

Archive for the ‘mucho cuento’ Category

ESOPO Y LA ZORRA (FABULA VERDINEGRA)-

  • Padre nuestro, que estás en el Olimpo – dijo la Zorra, circunspecta-, mucho me temo que habré de andarme por las ramas del guindo y su guindilla…
  • Habla sin rodeos de yankylandia o corridas goyescas, hijastra putativa… Nos van a dar las uvas tu demora…Ardan asaz mis trompas de Falopio, que Eustaquio no sabe no contesta- replicó el aludido, misógino perdido y encontrado en un fresco pompeyano.
  • Con Lorca hemos topado, LeCarré me perdone: “Verde que te quiero verde”…
  • Uvas para que os quiero, moscateles y pasas o no pasas… – terció Esopo, siempre burro flautista, a la que canta.
  • Padre, tendré que ser yo quien te lo explique… “Casta diva” hasta ahora me llamaban… Bellini en el pilón mojó la cosa- gimió la Zorra, hecha unos zorros- Y una con estos pelos depilados…
  • Esopo se rascó sus partes nobles y, a posteriori, sentenció su cantinela salomona:
  • – A Eurovisión y ya estanos tardando, venga…
  • !No te digo lo que hay…! Vaya putada, mi brigada… El Zorro, roncando en su laurel al escabeche…

Read Full Post »

EL HOMBRE DEL TREN DE CERCANÍAS

Parecía muy seguro de sí mismo. Hablaba por hablar, seguramente, dispuesto a darle la tabarra a los viajeros. Manos temblonas y gafas a punto de caer de sus napiales, gruesas como cristales de botella. Iba abrigado, el pobre, a pesar de un otoño reluciente: bufandón boa constrictor, par de guantes sin duelo que ganar en su batalla pírrica, un gabán que conoció épocas mejores y pareja de botas enlutadas sin cordones, dispuestas a morir en el intento.

-Juzgad vosotros mismos – seguía su cantinela el aspirante a vagabundo- si algunos de nosotros no habremos nacido con el pie cambiado… Me equivoqué y, abofé, todavía lo estoy pagando… Aquella bofetada dio la vuelta mi a mundo… Mi hija, quiero decir mi hijo, salió por esa puerta de los sustos. No dijo ni ahí pudras. Nadie dijo que le diera una paliza… Hazmerreír de la gente, estaría bueno: vestida de payasa verbenera, chancleteando como no está mandado. Su madre finiquitó de tales trances, tumor para que os quiero tan maligno, que daba pena verla dar rugidos de fiera malherida , en llamando a su hijo por su nombre de pila: Gerardito.

«Brujuleé los siete puntos cardinales para obtener preguntas sin respuesta. Pareciera tragada o tragado por la tierra; y uno, capa caída, tras haber intentado, infructuoso perdido, corregir al que yerra.

«Acudí al centro parroquial, a la Guardia Civil, o sea la Benemérita; a juzgados de guardia polvorientos, a una comisaría de Policía, a una adivina que te echaba el tarot y a una seance invocando a los difuntos con la ouija… Todo valía, para sacarme las castañas bien calientes del fuego del infierno…

«Yo no digo que nos fuéramos a fundir en un abrazo de hombre a hombre o mujer a mujer, de darse el caso, si todavía estuviera en este mundo mi señora… ¡Tanto martirio, cuanta lencería fina… ! Una bata de cola es una cola… El diablo mata moscas con el rabo… A punto estuve de tirarlo todo por la borda a cañonazos… Me contuve: las armas siempre las carga el susodicho…

«¡Ay, mísero de mí; ay, infelice…!», como clamaba vete tú a saber quién fue, lo juro que, si te he visto, no me acuerdo…

«Mejor hubiera sido no acudir al médico de urgencia en tal apuro… Operación que te crio, divide y vencerás, a base de bisturíes y de anestesia… Y uno con estos pelos y estos palos… María Antonieta con sangre lapislázuli… ¡Que, enseguida, me corten una de las cabezas… ! Dios castiga sin piedra lapidaria…

«El desenlace de esta historia real, señoras y señores, no tiene desperdicio ni estropicio:

«En plena convalecencia hospitalaria, se me anuncia una visita inesperada… Se trata de mi hija y de su hijo… Rompí a llorar como una magdalena / magdaleno, hola tras ola… Marcel Proust y Galdós no tienen quien le escriban… No hacen falta palabras, sino hechos… Cinco minutos; cuatro medio y me sobran para romper el hielo y nuestro brindis, un vasito de plástico con agua destilada…

Mi nieto Bogart se parece se parece mucho a mí, lo mismo que su madre… Voy a contarle un cuento de robots… La novela hardboiled que se lo cuenten el Tío Chandler o Tío Hammet (al Tío Ellroy lo dejamos para luego)…

FIN

Read Full Post »

HASTA QUE LA SANGRE NOS SEPARE …

Para mi sobrina María, que domina el tema como nadie

Queridísima Ana María :

¡Cuan difícil comenzar desde el principio… ! Han sucedido demasiadas cosas durante tu ausencia y me temo que no sea capaz de enumerarlos. La vieja casa de nuestra familia apenas si se sostenía en pie y el viento ululaba en ella como herida de muerte. La tristeza había venida para quedarse entre nosotros, cansada, muy cansada de esperarte. Tu salud ante todo, insisto una vez más, mientras el cuerpo aguante. La tisis galopante pasará, ten por seguro, hermana con mayúscula.

Nuestro primo Leopoldo es quien se encarga de administrar las numerosas deudas y nuestra madre le agradece sus desvelos… No podría ser de otra manera… No sabemos de cuentas o números romanos… Un licenciado capaz de entender tantos tejemanejes supone una garantía en toda regla, porque el pobre papá ya no está para trotes, legajos y papeles de por medio… Le dice que sí a todo a su pariente.

Leopoldo, esto y aquello y lo demás allá… Tú conoces muy bien cómo las gasta… Sigue soltero, a los cuarenta y muchos… Pálido perdido, dientes largos, ojos enrojecidos… Será por eso que le espantan los espejos… Un aliento podrido, halitosis severa: lo cortes no quita lo valiente… Me ha pedido que salga alguna noche… Con la tuna, para rondarme, con la capa a la antigua usanza… Es un poco rarito nuestro primo Rodolfo… Ahora que caigo, antes del arrechucho hemoglobínico, tú y él solíais pelar la pava que da gusto, no lo niegues… Tonta de mí, fue nuestra progenitora la encargada de ponerme sobre aviso…

Según ella, deberíamos andar con mucho ojo sobre el tema. Le daba muy mala espina Leopoldito, su sobrino, aun reconociendo sus ventajas el tenerlo a su lado. Botón de muestra, tú mismamente, me imagino…

Y hasta papá salía malparado del aserto, con una dentadura postiza que daba pena verla en el lavabo.

Enseguida, supo lo que hacer de mi vida. Un nosferatu, un vurdulak o, para entendernos, un «vampiro» en román paladino y palatino, sólo precisa de una estaca de madera a corazón abierto y a otra cosa, mariposa… Que se lo digan a Van Helsing si no es cierto…

Peter Cushing, dando en el clavo con the Hammer, como siempre…

Preparada, lista, ya… Estacazo y tentetieso… Pero, de pronto, mi querida Ana Mary, todo mi ser se fundió en una duda razonable… ¿ Y si nuestro Leopoldo no fuesen tan malo como dicen, de buenas a primeras… ? Las envidias no te dejan ver el bosque y su maraña… No será tan fiero este león como lo pintan… Tanto absurdo alboroto, quítame allá esos henos y esas pajas: una sanguijuelilla bañándose en la alberca, una jarra refrescante de sangría en el verano, el ciclo menstrual de una casta doncella… Menos lobos pues, no vayamos a pasarnos de la raya…

Sí pero no, no pero sí… ¿Lo digo o no lo digo, hermana mía… ? Va a ser sí y que sea lo que dios quiera… Me pincharé con la espina de una rosa, en presencia de mi bien amado a medias, y dejaré que mi dedo índice florezco entre la nieve nieve de mi mano derecha… Una flor y otra flor de sangre roja… La prueba del vampiro: el algodón no engaña…

Corro, alada, en pos de mi destino… Tu fraternal herma que te quiere, Carmilla (para los íntimos, Carmiña, Sheridan Le Fanu a la cabeza).

POSTDATA-¡Qué horror, qué horror mas espantoso…! Dispuesta darle ya la albricia prometida, se me olvidó que Leopoldo, durante el día, siempre duerme con las ventanas cerradas para evitar el sol y, en tocando las doce en la iglesia del pueblo, abrí, de par en par, todos los cortinajes de la casa… Quedó hecho polvo, el pobre, insolación al canto, ceniza a las cenizas… Enterrado en sagrado, por supuesto…

Ah, por cierto… Puede que, después de todo, no fuera vampiro nuestro primo… Pero un zombie, seguro; ponle el cuño y la cuña…

En cuanto a una servidora, se me están apagando los espejos…

FIN

Read Full Post »

Older Posts »